Inocencia

(Foto: El niño de la burbuja de Joseo Garcia Millan)

Quizas las madres pecan por tener a sus hijos

en una burbuja

para evitar que sufran sus pequeñuelos.

Muchas veces hemos visto crecer a nuestros angelitos

vulnerables a cualquier mal y sin querer

no nos damos cuenta que en cualquier momento

tienen que enfrentarse a la vida.

Es por eso que en los momentos difíciles

anhelamos tan sólo los brazos de nuestra madre,

y llorar intensamente nuestras penas

sintiéndonos protegidos y especialmente ..."queridos".

Hoy, una de tantas veces he sentido la necesidad

de recordarte madre, de recordar esos momentos

en que después de una caída, allí estabas

a mi lado.

Ahora estás tan lejos y yo aún me siento como una niña

no te culpo por lo inocente que me has hecho,

ni por haberme protegido,

porque ahora yo soy madre y hago lo mismo.